Las intervenciones telefónicas realizadas a los tres máximos directivos del Grupo Cursach, con su dueño a la cabeza, no sólo han revelado el fácil acceso que el holding tenía con la directora general de Turismo Pilar Carbonell, cuyas conversaciones fueron publicadas ayer por este diario y que han comprometido su continuidad en el gobierno. Otro destacado hombre del PSIB, el ex director de la Policía Nacional y la Guardia Civil y ex secretario de Estado de Turismo, Joan Mesquida, aparece en los pinchazos informando de primera mano al Grupo Cursach desde su cargo de director de proyectos del Ayuntamiento de Calvià.
Mesquida aparece como una de las numerosas personas con las que mantuvo contacto telefónico el número dos de Cursach, Bartolomé Sbert, quien movía todas las influencias políticas para velar por sus negocios y luego informar puntualmente a Cursach.
Las pruebas de cómo Cursach machacaba a la competencia
Las grabaciones denotan familiaridad entre ambos. Sbert llega a decirle en un momento dado que es un «crack», y le gestiona un pase al palco reservado para un concierto, se infiere por las fechas que podría ser el que el DJ David Guetta ofreció en el hotel BH de Magaluf en agosto de 2015; y posteriormente un pase para el gimnasio Megasport.
Según la transcripción policial de las conversaciones que obran en el sumario judicial, el 18 de agosto de 2015 Sbert le llamó al Ayuntamiento para decirle que había sido requerido por el Consistorio para que presentara un proyecto acústico, se entiende que para el concierto de música electrónica. Le habían comunicado que se pasaban de 5 decibelios y que no lo podían hacer. Mesquida le contestó que se lo iba a mirar y Sbert le replicó gráficamente:«Me sabe mal mandarte trabajo».
Tan sólo 20 minutos más tarde, Mesquida llama a Sbert, le dice que ya ha hablado con el ingeniero municipal y «que lo presente, que no hay complicación, que digan que se pasarán de cuatro o cinco decibelios durante un tiempo determinado». Agrega que es «simplemente porque tienen que hacer un informe técnico pero que no son los que lo autorizan, ya que eso después lo firma el concejal Toni García Moles». Mesquida le dice a Sbert que lo entreguen al día siguiente y que el ingeniero, de nombre Bernardo, «está a su disposición».
Fuente… El Mundo…